Yekaterina, de 26 años, es una joven rusa que publicó una subasta en Internet para vender su alma por 500.000 rublos (un poco más de 15.000 dólares). Según lo que afirma ella, esa es la cantidad que le hace falta para arreglar su departamento.
Para describir el “producto” a la venta, la propietaria dijo que el alma “se encuentra en perfecto estado, un poco desgastada, sin abolladuras, bien cuidada y con aspecto de nueva”.
Hasta el momento no recibió ninguna oferta concreta. Sin embargo, la joven dice le llegaron algunas “propuestas indecentes” a cambio de dinero, según informa el portal web ruso Russia Today.
La idea de subastar su alma se le ocurrió de modo “espontáneo”, cuenta Yekaterina, cuando reflexionaba sobre diferentes posibilidades de “obtener ingresos adicionales”. La joven dice que se vio “obligada” a tomar esta medida, ya que su sueldo de empleada en una importante multinacional en Moscú “no responde a sus necesidades materiales”.
“No voy a vender mi alma a ningún salón de magia negra. Simplemente la vendo nada más que como un souvenir”, agregó la vendedora.