El gobierno rionegrino podría estar incurriendo en una serie de violaciones a la veda electoral que establece el artículo 64 quater del Código Electoral. Desde el sábado pasado quedó prohibida “la realización de actos inaugurales de obras públicas, el lanzamiento o promoción de planes, proyectos o programas de alcance colectivo y, en general, la realización de todo acto de gobierno”. Entre el lunes y martes de esta semana se llevaron a cabo, al menos tres ceremonias de este tipo.
Pero no serían los únicos, ya que lo propia presidente de la Nación Cristina Fernández, encabezó ayer la inauguración de una fábrica de lavarropas en Cañuelas junto a algunos de sus postulantes a legisladores de los principales distritos del país.
Cabe destacar que la norma legal mencionada anteriormente prohíbe “todo acto de gobierno que pueda promover la captación del sufragio a favor de cualquiera de los candidatos a cargos públicos electivos nacionales”.
En Río Negro, el legislador Martín Doñate entregó este lunes netbooks en una escuela de Choele Choel. Su discurso estuvo dedicado casi exclusivamente a las bondades del gobierno kirchnerista, criticando a sus antecesores.
El enojo de Peralta
Ayer por la mañana, se realizó un acto de apertura de sobres de una importante licitación, donde el vicegobernador Carlos Peralta resaltó el éxito del gobierno del Frente para la Victoria en Río Negro, comparándolo con las gestiones del radicalismo.
Al término de la ceremonia fue consultado sobre la posibilidad de haber violado la veda electoral y reaccionó de mala manera. “Algún fiscal, seguramente, se hará cargo de investigar, pero este no es un acto de Gobierno”, dijo –desconcertado- el Presidente de la Legislatura provincial.
“¿Por qué no me hace una pregunta más importante? ¿Por qué no habla de la buena inversión que vamos a hacer?”, expresó Peralta a FM DE LA COSTA, pero sin destacar que ese mismo medio había transmitido en vivo todo el acto. Tras esas palabras se marchó, visiblemente ofuscado.
Pero los actos de gobierno no terminaron allí, ya que por la tarde el propio gobernador Alberto Weretilneck entregó vehículos policiales en Cipolletti.
Sin embargo, los representantes del oficialismo rionegrino no son los únicos que desconocerían los alcances de la veda, ya que integrantes de la oposición fueron consultados y no supieron qué responder.
La utilización de actos de gobierno para resaltar las bondades de una gestión a pocos días de una elección no es exclusividad del Frente para la Victoria. Durante muchos años lo hicieron los radicales y los justicialistas se quejaban.
La pregunta es: ¿Para qué instalar un período de estas características si nadie, ni siquiera la Presidenta de la Nación, lo respeta?