(NOTI-RIO) Desde hoy y hasta el miércoles, empleados de la Asociación de Trabajadores del Estado resolvieron levantar las barreras de control zoofitosanitario en varios puntos del norte de la Patagonia. Es en el marco de un paro de actividades por 72 horas en reclamo de un aumento salarial y mejoras en las condiciones laborales.
La medida dispuesta por los dirigentes de ATE de levantar los controles zoofitosanitarios de Funbapa comenzó a expandirse por todo el norte de la Patagonia.
El primer piquete se estableció en Paso Córdoba, cerca de las 9, mientras que para los próximos minutos los dirigentes del gremio tienen previsto interrumpir el ingreso a la sede de Funbapa, en Viedma, que se encuentra ubicada en el predio de la Sociedad Rural.
El dirigente Rodolfo Aguiar confirmó que hasta el momento las barreras sanitarias se levantaron en Río Colorado, La Adela (La Pampa), el control 714 (Bahía Blanca), Picún Leufú (Neuquén), y en Río Negro en Paso Córdoba (Roca), Casa de Piedra y San Antonio Oeste.
Los dos puntos claves de la protesta se centrarán en Río Colorado y Casa de Piedra, según explicó Aguiar.
Los empleados reclaman un aumento salarial, el cumplimiento de la Ley 23551 de Asociaciones Sindicales, un nuevo Convenio Colectivo de Trabajo, reconocimiento de la libertad sindical, capacitación y el mejoramiento de las condiciones edilicias y laborales.
e los hechos de público conocimiento, Funbapa informó que la nueva medida de fuerza llevada adelante por el gremio ATE carece de razón y legitimidad, y representa un verdadero atentado no sólo contra la política sanitaria nacional y regional sino también contra todo aquello que dicha política promueve, incluyendo las fuentes laborales creadas para implementarla y sostenerla.
En este sentido, es necesario aclarar que Funbapa posee un Convenio Colectivo de Trabajo homologado ante el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, en cuyo marco se desarrollan normal y habitualmente las reuniones paritarias donde se discuten todas las cuestiones que atañen a los trabajadores. ATE pretende participar de ese ámbito sin ser parte de dicho Convenio Colectivo de Trabajo, y esto ha sido rechazado por la propia autoridad competente, es decir, el mismo Ministerio de Trabajo de la Nación.
En función de ello, las medidas de fuerza que el sindicato lleva adelante adquieren, además de ilegitimidad, una fuerte impronta antidemocrática, tal como queda demostrado en la actitud del gremio ante el resto de los trabajadores y ante la comunidad en general en cortes de rutas y puentes, bloqueos, pintadas, pegatinas, entre otros, y en la recurrencia a la difamación permanente y gratuita en reemplazo de argumentos válidos.
Frente a ello, en más de 20 años Funbapa jamás dejó de someterse al ámbito de la ley (ni a los controles que de ella emanan, tanto en cuestiones laborales como económicas, financieras, etcétera), dando todos los debates necesarios, pero apostando al diálogo y a la construcción de alternativas viables sin extorsionar ni recurrir a la presión que desconoce y cercena los derechos de los demás y no se hace cargo de la propia responsabilidad.