Las deudas domésticas ¿conviene financiarlas con tarjeta de crédito o préstamos personales?

El endeudamiento se volvió un dolor de cabeza para la clase media argentina. Según la consultora D’alessio Irol, en un informe de marzo, reveló que el 73% de las familias de sectores medios tiene deudas. La respuesta parece venir de la mano del aumento de precios en detrimento de la suba de sueldos.

Es por eso que ante la necesidad de tomar deuda para pagar gastos corrientes de una familia, surge la pregunta ¿conviene financiarlas con tarjeta de crédito o préstamos personales?

El analista Christian Buteler en diálogo con Ámbito destacó que históricamente “las deudas domésticas convienen financiarlas con créditos personales que suelen tener mejores tasas que una cuenta corriente o una tarjeta de crédito”. Sin embargo la situación actual contradice esta premisa.

“En este momento y por una disposición del Banco Central hay una anomalía en el mercado ya que se le puso un techo a las tasas con las cuáles las entidades bancarias pueden cobrarte con la tarjeta de crédito” aclaró Buteler por lo que actualmente “te conviene más financiarte con una tarjeta de crédito bancaria que con un préstamo personal”.

El Banco Central en enero resolvió que la Tasa Nominal Anual (TNA) mantendrá un máximo del 43% para el financiamiento de saldos impagos de tarjetas de crédito de hasta $200.000. Cabe remarcar que el 95,5% de los usuarios que utilizan ese mecanismo de financiamiento.

La tasa de interés nominal (TNA) no es el único costo que los bancos aplican sobre las deudas es por ello que si se le suman los recargos por comisiones e impuestos queda el Costo Financiero Total (CFT), que es el monto que finalmente paga el cliente. En estos momentos el cliente paga una deuda con tarjeta de crédito, dependiendo de la entidad, con un CFT de 53% sin IVA, y cercano al 67% con IVA.

No es el caso de los prestamos personales. “Como no tienen techo, en los prestamos personales podés encontrar tasas del 70% hasta muy por arriba de 100%” aclaró Christian Buteler por lo que, en estos momentos, “te es más económico financiarte con tarjeta de crédito”.

El analista de mercado también explicó que hay poca disponibilidad de préstamos personales: “Los bancos no están muy volcados a dar créditos porque hay un problema en los ingresos de la gente. Los bancos tienen que estar muy seguros para dar el crédito y saber que lo pueda pagar; más a esas tasas”.

Buteler también destacó que si bien las tasas de las tarjetas de créditos acompañan el devenir inflacionario no sucede lo mismo con los sueldos.

“Cualquiera de las tasas que tomes para financiarte con esos porcentajes es difícil. Si bien cuando lo tomás en términos reales, la tasa de la tarjeta de crédito no está mucho más arriba de lo que es la inflación; si está mucho más arriba de como están creciendo los ingresos“, cerró el analista de mercados.

Recomendaciones para sacar un préstamo personal

  • La tasa de interés es sólo uno de los componentes que conforman el costo de un crédito. La correcta comparación de costos se debe utilizar el Costo Financiero Total (CFT) del mismo que incluye la tasa de interés efectiva anual (TEA) y todos aquellos costos asociados a la operación (tales como seguros, impuestos, entre otros).
  • Se puede optar entre una tasa de interés que se mantenga estable a lo largo del préstamo (tasa fija) o que varíe periódicamente (tasa variable).
  • Si el préstamo incluye la contratación de seguros, hay que tener en cuenta que según la ley, el cliente tiene derecho a elegir entre tres diferentes aseguradoras.
  • Tener en cuenta que si el tomador del préstamo es consumidor final deberá pagar el IVA sobre los intereses abonados cada mes, lo que impactará en la cuota.
  • Si el préstamo contempla la posibilidad de una cancelación anticipada, parcial o total, es conveniente conocer cuál es su costo.
  • Todas las condiciones informadas por la entidad financiera al momento de ofrecer el préstamo deben figurar en el contrato.

Recomendaciones para el uso de tarjetas de crédito

  • Dentro de los costos relacionados a la utilización del producto, se incluyen seguros de vida sobre los saldos financiados, gastos administrativos, gastos de renovación de la tarjeta y comisiones que se cobran por el retiro de dinero en efectivo, además del IVA sobre los intereses compensatorios.
  • Hay que considerar la tasa de interés compensatoria por financiar sus compras, la tasa de interés punitoria por no efectuar el pago mínimo que indica el resumen mensual, el monto de ese pago mínimo las comisiones cobradas por superar el límite de compra.
  • Al comprar con la tarjeta, se recomienda tener en cuenta la capacidad de pago que se tiene en las sucesivas cuotas.
  • Al momento de hacer una compra, la transacción debe hacerse dónde puedas verla, para evitar cualquier uso con el que no estemos de acuerdo. También es aconsejable guardar los tickets de compra para confrontarlos con el estado de la cuenta.
  • Es aconsejable evitar pagar solo el pago mínimo del saldo de la tarjeta. La acumulación de saldo genera intereses mayores en el futuro.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *