(NOTI-RIO) El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) intensificó durante los últimos meses las tareas de vigilancia epidemiológica y control sanitario en establecimientos ganaderos ubicados en una de las franjas más sensibles del país en materia sanitaria: el límite entre las zonas libres de fiebre aftosa con y sin vacunación.
El operativo tuvo especial impacto en los departamentos Pichi Mahuida, en la provincia de Río Negro, y en Caleu Caleu, al sur de La Pampa, áreas atravesadas y delimitadas naturalmente por los ríos Colorado y Barrancas, considerados verdaderas “fronteras sanitarias” del país.
Una frontera sanitaria clave para la ganadería argentina
Según datos oficiales del Senasa, estas acciones se enmarcan en el Programa Nacional de Fiebre Aftosa, que establece estrategias diferenciadas para la Zona Libre con Vacunación (ZLCV) y la Zona Libre sin Vacunación (ZLSV). La región bajo análisis es particularmente sensible, ya que cualquier desvío en los controles podría comprometer el estatus sanitario alcanzado por la Argentina, reconocido a nivel internacional.
Desde el inicio de la primera campaña anual de vacunación antiaftosa hasta la actualidad, el organismo sanitario auditó 235 establecimientos, que comprenden 340 unidades productivas, distribuidas en las provincias de Mendoza, Neuquén, Río Negro, La Pampa y Buenos Aires.
Los trabajos fueron realizados por agentes de los centros regionales La Pampa–San Luis, Patagonia Norte, Cuyo y Buenos Aires Sur, quienes recorrieron extensas distancias para inspeccionar predios ganaderos en localidades estratégicas como La Adela, Cuchillo Co, Puelches, Colonia 25 de Mayo, Río Colorado, Choele Choel, General Roca, Chos Malal y Carmen de Patagones, entre otras.
En cada establecimiento, los equipos técnicos verificaron:
- La vacunación obligatoria de los rodeos en zonas con vacunación
- El stock declarado de bovinos y otras especies susceptibles
- La identificación individual del ganado
- Las condiciones de infraestructura
- El estado sanitario general de los animales
Estas inspecciones no solo cumplen una función de control, sino también de acompañamiento técnico a los productores.
Información y prevención: una tarea clave con los productores
Un aspecto central del operativo fue la concientización directa en el territorio. Los agentes del Senasa brindaron información actualizada sobre la fiebre aftosa, recordando los signos clínicos de la enfermedad —como ampollas en boca, pezuñas o ubres, fiebre y decaimiento— y la obligación de notificar de inmediato cualquier sospecha.
La enfermedad afecta a bovinos, bubalinos, ovinos, caprinos y porcinos, y su detección temprana resulta clave para evitar consecuencias sanitarias y económicas de gran impacto.
Importancia regional y compromiso sanitario
Para departamentos como Pichi Mahuida y Caleu Caleu, donde la ganadería cumple un rol central en la economía local y el arraigo rural, estos controles representan una garantía de previsibilidad productiva y una defensa del trabajo de los productores que cumplen con la normativa vigente.
Desde el Senasa destacaron que la presencia sostenida en el territorio reafirma el compromiso del organismo con la sanidad animal, adaptando sus acciones a los distintos escenarios provinciales y reforzando una política sanitaria que es considerada una de las más sólidas de la región.
