El abogado y dirigente justicialista de General Roca, Rodolfo Ponce de León, señaló que “no hay otro camino” que el peronismo recupere “el poder perdido; recuperar lo que la sociedad votó, y la sociedad en gran medida votó a Carlos Soria, pero también votó al peronismo y en contra de algo”.
Dijo que el gobernador Alberto Weretilneck “se sacó la gobernación en una fatal lotería y no puede pensar en el 2015, sino que es un emergente que viene a cumplir un mandato de cuatro años y punto”.
Indicó que “el gran error es pensar que el triunfo fue de él”, y por eso “no habla con el justicialismo” y en la búsqueda de apoyos “se relacionó con lo peor del radicalismo”.
Afirmó en este marco a la agencia APP que “Weretilneck eligió que su destino es distinto al del justicialismo” y por eso “lo menos traumático, porque ha perdido mucho apoyo político, es que renuncie y se llame a elecciones nuevamente”.
Ponce de León afirmó que “no hay diálogo posible” entre el peronismo y Weretilneck, y en ese marco “hay que convocar al pueblo nuevamente, decirle que nos pasó esta fatalidad, que la oportunidad que nos dieron entonces la renueven ahora, que seguimos con la misma vocación de servicio”.
Señaló que Weretilneck no sólo dio la espalda al justicialismo y empezó a dialogar con dirigentes radicales que la ciudadanía repudió, sino que en el gobierno “empezó a aplicar más de lo mismo, yo no puedo ir a hacer actos porque entrego 10 computadoras, no puedo decir que sí, que los ministros ganan mucho pero es todo en blanco, cómo, ahora le damos un premio por no ser delincuentes, los sueldos tienen que ser austeros porque la provincia está mal”.
Aseveró a la agencia APP que si la presidenta “nos pidió sintonía fina, tenemos que hacer sintonía fina en todos lados; no tenemos un plan para la fruticultura, qué vamos a hacer, seguir repartiendo subsidios a los chacareros; vamos a terminar repartiéndoles bolsas de comida como repartía Verani; esto es una forma de demostrar la bifurcación de caminos que hay”.
Expresó que “la diferencia es insalvable y lo mejor que puede pasar es que Weretilneck renuncie”, subrayando que “los mensajes tienen que ser claros para que el pueblo, la gente común, entiendas las cuestiones; esto no es conspirativo, si fuera así no lo diría públicamente; no es bueno que estas situaciones se prolonguen, ojalá se resuelva a la brevedad”.
Ponce de León mencionó que lo que pasó en Río Negro, la muerte trágica de Carlos Soria a poco de asumir y la asunción del vicegobernador, “no tiene antecedentes en ninguna provincia”, y eso generó “una falta de apreciación de Alberto Weretilneck de las condiciones en que llega” a hacerse cargo del Ejecutivo.
Afirmó a la agencia APP que “el gran votado no fue Weretilneck sino Carlos Soria y el peronismo; los políticos suelen creer que están en el ombligo de Adán, y la verdad que Weretilneck es menos importante en la política provincial que lo que él supone”.
Indicó que “su derrotero político debe ser otro; del 54% que sacó el FpV, poco más del 30% son votos peronistas y el resto fueron votos en contra del radicalismo, de un gobierno que fue nefasto para la provincia”.
Señaló en este marco que Wereltineck “al reanudar lazos con quienes la ciudadanía repudió también traiciona el voto; pero además reanudamos lazos con lo pero del radicalismo, nos sentamos a negociar cuestiones con Daniel Sartor, con Pablo Verani, quien está más preocupado por el gobernador y el Frente Grande que por su partido que se evapora lentamente”.
Contradictoriamente Weretilneck “no habla con el justicialismo, que es un razón de ser”, aseveró.
Reflexionó a la agencia APP que “lo que siempre me hizo desconfiar del gobernador es su permeabilidad al radicalismo, y efectivamente su desconexión con el justicialismo tiene que ver con sus relaciones casi adúlteras con personajes del radicalismo que la ciudadanía repudió”.
Indicó que todo esto “estuvo acompañado de la no modificación de cuestiones esenciales que hacen a la provincia”, ejemplificando que “es indecoroso cobrar las cantidades que cobran los funcionarios, aunque lo haya decidido Carlos Soria, estaba mal y está mal; si como ministro cobran 50 mil y antes de ingresar al Estado vivía con 15 mil, bueno, que cobren 30 mil, pero no más, porque acá no vinieron a enriquecerse; yo tengo el viejo ideal republicano de que tienen que cobrar en forma similar a lo que cobraban antes de ingresar a la función pública”.
Ponce de León aseveró que “si estuvimos 28 años diciendo que estas cosas estaban mal, ahora no pueden estar bien, siguen estando mal; no puede ser que si lo hacen los radicales está mal y si lo hacemos nosotros, nos hacemos los boludos”.